Por Ricardo César
Bazán - Téc. Sup. en Cooperativismo
El que escribe siendo estudiante de cooperativismo tuvo la
suerte de asistir a una conferencia que diera Jesús de Larrañaga en la ciudad
de Concordia el 22 de noviembre de 1993. A continuación la transcripción de
parte de la misma.
“La cooperativa es un instrumento, es un modo organizativo
hacia adentro, pero es una manera exacta igual que otra empresa de cara al
mercado”
J.L
El primer contacto que tuve con el destacado cooperativista español
Jesús de Larrañaga fue en una reunión que tuvimos un grupo de estudiantes en la
cual le pudimos preguntar sobre esta experiencia cooperativa en la cual él fue
partícipe y uno de los fundadores de lo que hoy se conoce como Mondragón
Corporación Cooperativa (MCC).
Luego de esta reunión informal asistimos al salón de la
Facultad de Ciencias de la Administración de Concordia donde habló sobre la
experiencia cooperativa llevada a cabo en el país vasco.
Jesús de Larrañaga comenzó diciendo: “Su origen es en el año
1956 formalmente, pero en realidad fue,
como la historia es casi siempre falsa (...) pero aquí también, porque
empezó en 1955. Inicialmente, la raíz de todo este planteamiento en el fondo se
debe a un sacerdote, que se llama José María Arizmendiarreta, un poco largo no,
pero él se llama Arizmendi. El susodicho sacerdote era un hombre que había sido
periodista en la época de la guerra civil en el bando republicano, era un
hombre que escribía en vasco y en castellano. Entonces éste estuvo condenado a
la muerte, porque era periodista pero al final se salvó. No voy a describir los
detalles porque son cosas muy finas, la cosa es que en la guerra aprendió
varias cosas: una, que hay que mentir en la política, que no hay forma de vivir
en la política realmente con la verdad absoluta, porque él que era periodista,
tenía que escribir diciendo que los rojos o los republicanos iban a ganar la
guerra y era mentira, pero era un elemento de animación para el sector diríamos
que estaba perdiendo la guerra y era mentira, pero era un elemento de animación
para el sector. Diríamos que estaba perdiendo la guerra. Pero aprendió una cosa
más profunda, y es que los que sabían, los que sabían algo, son los que podían
escalar los grados de capitán comandante, y los que no sabían, pues no podían
hacer nada más que ser tropa directa. Y de allí es que decía que “hay que
socializar el saber… para democratizar el poder”, y por lo tanto él vino del
seminario de Vitoria de allí a 30 kilómetros, y lo primero que hizo fue
promover un planteamiento educativo y de formación profesional, pues con ese
slogan él dirigió todos sus esfuerzos en el sentido de crear en la comunidad de
Mondragón, que era un pueblo pequeño de 10.000 habitantes, una escuela profesional
que sirviera para todos. Porque yo por ejemplo estudié en la escuela de una
empresa que estaba cerrada solo para los hijos de los que trabajaban allá, y de
allí nace diríamos, una filosofía fundamental en él que era esa, y otra muy
clara es que las ideas que no encarnan son ideas vanas, es decir hace falta
menos especulación y mas realidad, por lo tanto el que tiene unas creencias, el
que tiene una ideología, el que tiene un pensamiento, está bien que lo tenga. Lo
bueno es que lo vuelque en la sociedad,
en la comunidad haciendo que el “anteparaíso”, si se puede llamar entre
comillas a este mundo, pues se haga aquí, porque el de arriba debe tenerlo todo
resuelto, así que vamos a resolverlo los de abajo, porque el de arriba no
necesita ningún incienso especial para sentirse cómodo, sin embargo la
humanidad es la que tiene los problemas desde que vinimos. Y otro elemento
fundamental en él fue un artículo que acabo de publicar, supongo que se
publicará, que acabo de escribir sobre él que se llama “Un Paso Mas”. (…) Nosotros estudiamos. Los que iniciamos
este tinglado de las cooperativas una vez que terminamos un nivel elemental de
escuela profesional, inmediatamente nos propuso estudiar a distancia una
carrera de ingeniería, porque él entendía que para escalar a determinado nivel
de gestión empresarial, o se tiene una capacidad profesional o no se tiene, por
lo tanto desde ese punto de vista fue un hombre que nos forzó permanentemente a
la búsqueda de una elevación de nivel cultural y profesional para poder
realmente vehicular.
"Otra idea que él mantuvo siempre fue el de la coherencia
entre creencia y vida, por lo tanto el que se sentía cristiano, católico - pues
vamos, y tampoco era tan fanático de la actividad religiosa -, yo creo que tenía
una concepción de vida muy abierta, por lo tanto no le preocupaba, y entonces
nos exigía a nosotros que estábamos en militancias católicas, como la juventud
acción católica, la J.O.A que era la juventud obrera etcétera, nos exigía ser
coherentes en la vida y renunciar a nuestra propia acumulación que podíamos
haberlo hecho tratando de hacer una empresa mas comunitaria. Pero no fue así
desde el principio, porque al principio se intentó cambiar lo que se llama la
ley de sociedades anónimas, pretendiendo que le dieran entrada al trabajador
como tal trabajo, le dieran asientos en los consejos de administración y como
no podía ser menos fracasó, porque el santo santón del sistema capitalista está
en el consejo de administración y en el poder en función del capital, por lo
tanto nosotros ingenuos de nosotros pues pretendíamos modificar, más o menos
manipular ,porque este hombre que era enormemente tenaz.
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Instalaciones de Mondragón Corporación Cooperativa. |
"Y entonces aquí empieza un poco la odisea que empezamos, y
el intento de transformación de la sociedad anónima. Como era imposible, pues él
escribió incluso los estatutos de la única opción posible de que el trabajo
tuviera control de la empresa, y era hacer la sociedad cooperativa. Era la
única la que admitía diríamos la propiedad total, reduciendo al capital a una
función instrumental, y consecuentemente esa fue digamos el origen, casi por
carambola, no tanto por intención, pero había en el trasfondo un planteamiento,
que era que el trabajo tuviera naturalmente el control de los medios de
producción y el control de la empresa, lo cual era una especie de pequeña
herejía en aquel entonces. Pero aparte de eso hay otra clave, esa es una de las
claves, la clave está en este hombre, en su capacidad de visión estratégica, en
su enorme tenacidad, en su permanente impulso y sentido constituyente de la
vida, por lo tanto tenía una cierta reserva con los juristas, pues los juristas
consagran el pasado, y los creadores buscan el futuro, y él era muy creador que
buscaba el futuro, no consagra, por eso despreciaba un poco la publicidad y a
la abogacía, y trataba de agradar diríamos por los hechos, un estado diríamos
jurídico insuficiente.
"Y ocurre la segunda clave, es que al montar la primera cooperativa
de tipo industrial se tiene éxito, es decir, lo importante en la vida es que al
final lo que es una realidad económica social triunfe en el escenario social,
sino se puede quedar en una cofradía (…). Consecuentemente tuvo un éxito porque
éramos un grupo humano, no yo, yo era el más bohemio del grupo, sino los otros
eran más profesionales y se pudo triunfar rápidamente, porque incorporamos lo
que se llama la innovación , que fue lanzar dos productos de una estufa a
petróleo, de petróleo, que funcionaba con una mecha y no olía. Era la copia de
un producto inglés, y una cocina a gas tipo panorámico con el cristal. Y así
nació la cooperativa que se llamaba ULGOR, de los cuales es un acróstico con el
nombre de una serie de apellidos de las cuales la L es mía que es Larrañaga. En
fin, no voy a repetir esto, ahora todo se llama grupo FAGOR, porque la marca
comercial siempre ha sido FAGOR no ULGOR, porque ocurre, es eso tiene una
pronunciación más dura. (*)
"Otra clave es esa, que era un grupo, un equipo humano,
profesionalmente capacitado, que ya había experimentado, porque estudiamos y
trabajamos conjuntamente , y tuvimos
éxito en la primera cooperativa, la tercera clave sería un paso más, que
era, que una vez de haber hecho una unidad, en Arizmendiarreta veía una unidad
endogámica, es decir, que se mira hacia adentro y se cierra, o se abre, en cuyo
caso hay que darle lo que se llama una superestructura de grupo, porque la
unidad solitaria en general carece de voluntad política para proyectarse en
términos más amplios y elevar diríamos una capacidad que se podía haber quedado
en nada, en una cosa pequeña a un proyecto mas en movimiento, mas de
potenciación.”
Como la charla fue muy extensa a continuación transcribo
algunos pasajes que resultan datos o conceptos interesantes: “(...) de hecho
había que decir que esta experiencia se inició en Vitoria que está a unos 30
kilómetros de Mondragón, una pequeña ciudad, pero naturalmente en eso
Arizmendiarreta (…) vio que objetivamente los elementos de apoyo infraestructurales estaban en
Mondragón y por eso trajimos la empresa que iniciamos en Vitoria a Mondragón, y
es donde se incuba definitivamente el proceso (...).”
“Mondragón pues tiene que aspirar a ser una
multinacional cooperativa, no tiene otra salida necesariamente, por eso le
hemos denominado Mondragón Corporación Cooperativa”.
(*) ULGOR : Taller
que crean en Octubre de 1955, cada socio aporto 50.000 pesetas para poner en
marcha esta empresa en la que serian trabajadores y propietarios al mismo
tiempo. El nombre de ULGOR se formó combinando la primera letra de los
apellidos de sus cinco fundadores: Luis Usatore, Jesús Larrañaga, Alfonso
Gorroñogoitía, José Ormaechea y Javier oRtubay.
Fuente: Grabación realizada por el Ingeniero Sergio Godoy,
Ciudad de Concordia, 22 de Noviembre de 1993.