17/7/17

Urquiza, el normalista

Por Rubén Bourlot

Para el imaginario popular y para todo el andamiaje histórico construido desde el liberalismo, Domingo Faustino Sarmiento es considerado el “padre del aula”, el maestro por antonomasia, el fundador de escuelas, el que trajo a las maestras de maestras para edificar el normalismo en el país. Tal vez porque era un hábil publicista, polemizador y experto en el autobombo, supo construirse ese perfil que nadie se atreve a poner en tela de juicio.
Cada 11 de septiembre se exalta la figura del sanjuanino a pesar de las diatribas que se lanzan desde el revisionismo histórico, que no hacen mella en su rostro hosco y pétreo. No hay que quitarle méritos, a los 15 años fue maestro y con el tiempo llegó a presidente.
Para ser justos, la educación argentina sentó sus bases en el siglo XIX gracias al esfuerzo, la dedicación y la obsesión de personalidades que no siempre son puestas a la par del autor de Facundo. O por encima. No hay que olvidar que Nicolás Avellaneda como ministro de Instrucción Pública de Sarmiento fue el ejecutor sus proyectos, y luego como presidente continuó esa labor. Posteriormente participó activamente del  Congreso Pedagógico Sudamericano de 1882 y más tarde elaboró la ley de universidades. Y Juana Manso, esa gran educadora, amiga de Sarmiento, también sembró el país de escuelas. Y qué decir de las dos presidencias de Julio Argentino Roca, el impulsor del Primer Congreso Pedagógico, de la sanción de la ley de educación 1.420, que  tuvo vigencia por un siglo y el mismo que propuso durante su segunda presidencia, por medio de su ministro de Instrucción Pública - Osvaldo Magnasco -, readecuar profundamente las escuelas, rectificando muchos de los postulados de la ley original. Este último intento no pudo concretarse pero fue una interesante iniciativa de trocar la escuela universalista, enciclopédica y verbalista por instituciones de formación profesional y técnica que respondieran a las características y necesidades de cada región del país.

El normalismo de Urquiza
En Entre Ríos la figura de Justo José de Urquiza cobra relevancia nacional si analizamos su acción a la luz de una nueva interpretación del papel que tuvo con respecto a la educación. Se le reconoce el carácter de fundador del Colegio del Uruguay, el primer colegio laico de nivel secundario del país, pero en segundo plano queda la extensa labor que no se limitó a la fundación de un colegio. Las misma obsesión de Sarmiento pero tal vez anticipándose en tratar de instalar instituciones para formar maestros, de impartir educación vinculada a la producción como la incorporación de “chacras” anexas a las escuelas rurales y la instalación de una escuela pública para mujeres, una novedad en la primera mitad del siglo XIX. Pero lo que nos interesa subrayar es la idea que daba vueltas por su mente de instalar escuelas normales en Entre Ríos en la década del ’40, dos antes de que se fundaran los establecimientos impulsados por Sarmiento.
Fragmento de la carta de Galán a Urquiza
Como lo señala Antonino Salvadores en su historia de la instrucción pública, en 1948 Urquiza proyectó la instalación de dos escuelas normales, en Paraná y Concepción del Uruguay, que no pudo llevar a cabo por la falta de profesores. Recordemos que Sarmiento tuvo que contratar docentes de Estados Unidos para la instalación de las escuelas normales.
Sobre este proyecto hace mención el ministro general José Miguel Galán en una carta a Urquiza del 27 de octubre de 1848. En la misma le informa acerca del alquiler de la casa de Antonio Castro para el funcionamiento del frustrado Colegio de estudios preparatorios de Paraná. Y acota que “convencidos de que para obtener los importantes resultados que Ud. se promete de un decidido empeño por la educación pública, es necesario que ella sea uniformemente metodizada en todas las escuelas de la provincia: para conseguirlo debemos poner el mayor esmero en el establecimiento de la Escuela Normal de esta ciudad y la del Uruguay (…) Y agrega que “según los informes que me han dado el cura Vidal y el presbítero Erausquin no se podrá hallar un sujeto más a propósito para metodizar las dos escuelas normales que el presbítero Don José Delgado actual preceptor de la Escuela de Gualeguaychú.”
Si bien el proyecto no llegó a concretarse, recordemos que no es casual que las dos primeras escuelas normales del país se instalaron en Entre Ríos, la de Paraná en 1871 y la de Concepción del Uruguay en 1873.
Alumnas de la Escuela Normal de Uruguay en 1909
Entre otros aciertos, Urquiza tuvo la intuición de rodearse de eficaces colaboradores para la tarea educativa. En 1849 nombró nada menos que a Marcos Sastre como Inspector General de Escuelas quién redactó el reglamento de escuelas y escribió el libro “Anagnosia” para la enseñanza de la lectura. El coronel Manuel Urdinarrain también fue un activo colaborador en materia educativa que en 1948 organizó la enseñanza primaria en el departamento Uruguay. Con la creación del Colegio del Uruguay llegaron a Entre Ríos docentes de notable jerarquía como Alberto Larroque,  Jorge Clark, Vicente H.  Montero, Juan Manuel Blanes, Martín Ruiz Moreno, Lino Churruarín, Carlos Tomás Sourigues, Pablo G. Lorentz, Alejo Peyret, entre muchos otros.

Fuentes:
-       Salvadores, Antonino, Historia de la instrucción pública en Entre Ríos, Gobierno de Entre Ríos, Paraná, 1966.
-       Archivo General de Entre Ríos, Hacienda, Instrucción Pública.

14/7/17

¡Flor de papa frita el que come Lays!

Por Rubén Bourlot

En estos días de conflicto con las empresas multinacionales que elaboran alimentos como es el caso de Pepsico, o hace un tiempo Kraft nos preguntamos ¿qué nos pasa que no somos capaces de producir nuestros propios alimentos? ¿Necesitamos multinacionales que no fabriquen papas fritas? ¿Es que no somos capaces de fabricar galletitas? Seguro que los más viejos recordarán cuando en Entre Ríos los molinos harineros manufacturaban el trigo y también tenían fábricas de fideos y galletitas. Así La Hobena de Gualeguaychú, los fideos Santa Teresita de Colón. ¿Es que necesitamos que una multinacional nos envase gaseosa? ¡O agua! Recordarán muchos cuando la fábrica de soda del barrio también ofrecía jugos gasificados de naranja, pomelo, etc. ¿Es tan complicado fabricar una hamburguesa? El carnicero del barrio nos puede hacer hamburguesas, incluso personalizadas a gusto del cliente. Pero no, prefieren la grasosa e indescriptible hamburguesa “feliz”.
Pero seguramente, además de las dificultades para lograr escala y negociar con los grandes pulpos de la comercialización, se suma una falta de normas acordes que promueva las iniciativas locales y regionales, e incluso la producción familiar que puede convertirse en una alternativa de ingreso.

Los alimentos de la chacra
Para quien produce alimentos en su chacra o elabora productos en su cocina no le resulta sencillo llegar al dichoso mercado. Tiene que hacerlo en ferias informales donde los organismos oficiales de control “flexibilizan” o hacen la vista gorda de las normas. O a través de circuitos alternativos, de boca en boca, por las redes sociales, etc. Hace unos días en una feria de Paraná el director del Instituto de Bromatología de Entre Ríos, Pablo Basso, mencionaba que la producción de la agricultura familiar no está tipificada en el Código Alimentario Argentino. Es más, planteaba que la producción de alimentos artesanales, inclusive los de origen ancestral, es “difícil de habilitar de acuerdo a las características que exige ese código. Es mucho más fácil habilitar un producto ultraprocesado de una gran industria, que hace tal vez una papa frita que casi no tiene papa, que un quesillo del norte que se hace así desde hace 20 mil años.”
Resulta absurdo que alimentos industrializados en serie, saturados de conservantes, saborizantes, sodios y azúcares de todo tipo sean considerados aptos para el consumo; que vegetales producidos con una alta carga de fertilizantes artificiales, que sufren el bombardeo de pesticidas y plaguicidas a lo largo de su desarrollo, se habiliten alegremente para matar el hambre de la población, pero un dulce fabricado en la cocina de un hogar, con zapallos cosechados en el fondo, fertilizados con los cáscaras de papa y casi sin uso de agroquímicos no estén contemplados como alimentos para comercializar. Que un queso elaborado para consumo de la casa, o los chorizos de la carneada, cuando sobran no pueden venderse en el almacén del barrio.

¿Que sí se venden? Seguro, se venden pero todo en la informalidad y con el riesgo que caiga una inspección y le clausuren el negocio.
“Recomiendan no consumir ciertas latas de duraznos en almíbar en mal estado”, “Decomisan más de 10 mil kilos de alimentos en mal estado”,  “Bromatología multó a una heladería y retiró mercadería en mal estado” son titulares habituales de los diarios que hacen referencia a problemas con alimentos que en teoría cumplen con todas las formalidades de elaboración exigidas por las normas vigentes.
Se podría hacer una simple estadística para comparar cuántos casos de intoxicación se producen por consumir alimentos elaborados en casa, y confrontarla con los casos denunciados por el consumo de alimentos industrializados. Hagamos un análisis de entrecasa. Quiénes sufrieron alguna patología alimentaria, ¿fue por un alimento elaborado en la cocina de la casa o por consumir algo elaborado? Es muy probable que la respuesta sea por una hamburguesa en mal estado, una lata de arvejas perforada, un yogur que perdió la cadena de frío, a lo que hay que sumar los efectos nocivos de los químicos agregados para saborizarlos, conservarlos y pigmentarlos.
Entonces por qué no establecer normativas para que productores primarios, elaboradores y manipuladores de alimentos familiares puedan lograr una habilitación sencilla para comercializar lo que producen. Es más, se debería fomentar este tipo de producciones, que ocupa mano de obra intensiva, recupera prácticas tradicionales, con escasa o ninguna utilización de químicos, y que vincula más directamente al productor con el consumidor.
Si se promueve este tipo de producción, se recuperan prácticas productivas ancestrales, se vuelve a la producción familiar, y se “reeduca” a los consumidores para que prefieran lo más natural, lo producido en el lugar, se promueve el desarrollo de inversiones en este tipo de industrias protegiéndolas (sí protegiéndolas) de la competencia voraz e inescrupulosa de productos chatarra, seguramente nos alimentaremos más sano y reduciremos el nivel de conflictividad que originan la compañías como Kraft o Pepsico, por citar ejemplos actuales, cuando deciden estrategias a nivel global sin ningún compromiso con las comunidades locales. 

7/7/17

Vivencias: Casualidad o causalidad

Por Rubén Bourlot

Corría 1976. Fin del secundario. Un año agitado. En el internado de la Escuela Agrotécnica de Colón – “La escuela granja”, como la conocían en la zona -, alguien desvelado encendió la spika en la madrugada del 24 de marzo y resonó desafiante el “comunicado Nº 1”. Inquietud, temor, la policía y la gendarmería que revisaban los roperos de los internos para buscar indicios de algo subversivo. La lectura con fruición de las cartas que los alumnos recibían de sus familiares, la incautación de alguna revista del PC que casi nadie había leído.
Corría 1976. Martínez de Hoz, desde la Sociedad Rural, se catapultaba al Ministerio de Economía para “achicar el estado y agrandar la nación”.
Corría 1976. Terminaban los seis años del secundario, seis largos años, que en perspectiva era solo un instante. El último día de clases. Faltaba aún el acto de colación.
Con un equipaje mínimo me dispuse a volver a mi lugar de residencia, en Las Achiras, una localidad a unos 15 kilómetros de Colón. Caminos de ripio y tierra.
Con un grupo de compañeros, como lo hacíamos habitualmente los fines de semana, caminamos hasta el acceso a la ciudad para “hacer dedo” y de esa manera ahorrarnos el colectivo. A poco de esperar una camioneta se detuvo y nos subimos a la caja. A mitad del camino, el vehículo iba a Concepción del Uruguay, pedí que me bajaran en el acceso a San Cipriano. En el lugar quedé esperando que alguien ingresara para continuar mi camino a casa.
Encuentro con mi padre
al llegar al Almacén Fusey
Pasaron unos minutos, se detuvo un Renault Gordini y subí. Un hombre de bigotitos conducía. “¿Hasta dónde vas?”, me pregunta. “Voy a Las Achiras”. “Justamente voy al almacén Fusey”, me dice. Sigue la charla, interroga, indaga. “¿Vos sos el que manda las notas a la revista”?, me pregunta.
Desde hacía un par de años yo había comenzado a enviar colaboraciones para una publicación que se editaba en Concepción del Uruguay, el periódico Información Agraria que circulaba por ciudades y pueblos de los departamentos Uruguay y Colón. Y sorpresivamente, para mí, esos escritos iniciáticos se publicaban en lugares privilegiados.
El conductor del Gordini no era otro que el propietario del periódico, José María Almeyra.
La charla discurrió por distintos asuntos vinculados a la actualidad del país, el periodismo, las vocaciones de un recientemente egresado agrónomo especializado en avicultura, y etc. Hasta que vino la propuesta. “Ando necesitando a alguien que me ayude con la publicación, que haga entrevistas y escriba notas, si te animás…”
La respuesta fue un puede ser, tras lo cual vino la invitación para visitar la redacción de la “editorial” que también editaba un periódico para la ciudad: Sucesos. Llegamos al Almacén Fusey y nos despedimos.
Un par de meses después ya estaba recorriendo en moto pueblos y colonias de la zona para buscar todo lo que pudiera ser publicable. Lo que pudiera despertar interés de los lectores. Previo curso rápido de fotografía para documentar gráficamente los testimonios con la Kodak Retina, y también de dactilografía. Las primeras notas eran manuscritas.
Casualidad o causalidad. Las dos cosas tal vez.

4/7/17

Maestras y maestros con olor a tiza

 
Por Rubén Bourlot

“Quiero pastores con olor a ovejas”, reclama el Papa Francisco. Lo mismo podemos decir sobre nuestros docentes, y en particular de quienes se encargan de diseñas las políticas educativas, y las necesarias reformas que tanto se reclaman en estos días. Para ello es imprescindible que los protagonistas de los cambios sean las maestras y maestros con olor a tiza, los que a diario gastan zapatos y cuerdas vocales en las aulas, además de los estudiantes, padres y toda la comunidad educativa.

Los informes sobre nuestro sistema educativo dan un resultado negativo, las evaluaciones muestran que no dan los números. Los expertos gastan tinta y bytes en sesudos análisis para contarnos lo que a diario los docentes constatan en el aula. Y nos ofrecen recetas infalibles para solucionar los problemas, la mayoría calcadas de las que se vienen proponiendo desde hace décadas. Mil intentos y ningún invento, como el título del conocido largometraje de García Ferré.

¿Qué hacer? ¿Cómo hacerlos? ¿Por qué hacerlo? ¿Con quiénes hacerlo? Los tres primeros interrogantes empiezan a resolverse si se acierta en el último. Con los docentes con olor a tiza.

 Sabemos que los que enseñan, los que está a diario frente a los alumnos en el aula no tienen tiempo en pensar horizontes muy lejanos, más allá de la tarea de preparar clases, corregir trabajos y exámenes, confeccionar planificaciones y carpetas didácticas, participar de las más diversas reuniones institucionales, atender padres y madres, acompañar a alumnos en excursiones, hacer capacitaciones para seguir aprendiendo y sumar puntajes para concursar, participar de marchas y asambleas para defender sus magros salarios, atender comedores, desayunadores, vigilar los recreos, participar de la cooperadora… y mucho más.

Pero es necesario hacerse el tiempo para imaginarse cómo cambiar esa educación que agobia a todos, que no consigue los resultados esperados, que se suspendió en el tiempo. Una estructura educativa del siglo XIX que pretende enfrentar los desafíos del siglo XXI.

No podemos dejar que los cambios de la escuela pasen por ese penoso ensayo y error que se viene practicando desde hace décadas, pergeñado por “expertos” desde un escritorio lejos del fragor de la tiza. Esos que “bajan” sus fórmulas mágicas “gugleando”, envasadas “all on one” con el manual de uso incluido, supuestamente exitosas en otras latitudes. Nos hablan del milagro finlandés, de los sistemas de España, de las bondades de la educación chilena.

El último intento es la reforma del secundario que trae como el último grito de la moda agrupar los contenidos por áreas afines y reemplazar las horas cátedra por cargos. Sí sería fantástico. Es un atractiva zanahoria. Pero ¿qué se traen debajo del poncho? Nombra profesores por cargo implica un incremento presupuestario. La solución: reducimos las materias y un mismo profesor/a se hace cargo del paquete de “sociales” (Historia, Geografìa, Etc. – all inclusive-), otro/a “exactas”. La ecuación cierra.

Por otra parte cada escuela estará obligada, con sus docentes, a presentar un proyecto educativo que le dé sentido a la escuela, es decir algo así como volver al ya fracasado polimodal del los 90 que pulverizó el sistema con cientos de terminalidades distintas. Y también cada establecimiento deberá planificar el año especificando cuáles son los indicadores de mejora que se plantea, de acuerdo a los datos y el informe que entrega la prueba Aprender. ¿Será una especie de competencia? ¿Vendrá después una categorización de escuelas con premios y castigos? Quién sabe. Es la lógica del mercado metido en la educación.

Otra novedad es la “flexibilización” de la repitencia, eliminando las molestas “previas” e implementando un sistema similar al universitario, recursando los espacios no promovidos. No es novedad un sistema de escuela “no graduada” pero… su implementación no es sencilla. Para eso hay que discutirlo con los docentes con olor a tiza. Si es solamente para no develar en las estadísticas los niveles de desgranamiento y repitencia, no sirve.

Entonces ¿qué hacemos? Porque criticar está bien, pero hay que acercar propuestas. Y las propuestas deben partir de los docentes en el aula. Las reformas deben empezar al revés, desde la escuela y la comunidad al mundo y no del mundo a la escuela. Como el fueguito para hacer el puchero debe calentar desde abajo. Que cada docente, que cada comunidad educativa, con sus maestros y maestras, con los alumnos, padres y vecinos, se junten a discutir y formular propuestas que culminen en un gran Congreso Federal de Educación.

Y aquí tiro sobre el pupitre algunas ideas, una tormenta de ideas:

- Presupuesto mínimo asignado por el estado nacional para distribuir en todas las provincias, garantizando un piso salarial a todos los trabajadores de la educación.

- Profesores por cargo en el secundario. Horas áulicas y no áulicas.

- Todas las escuelas hoy llamadas secundarias transformadas según el modelo de la escuelas técnicas, con espacios curriculares de formación común, espacios específicos de la orientación y espacios para la práctica. Para ello es aplicable el modelo de jornada completa de las escuelas técnicas.

- Escuela no graduada que flexibilice los tiempos de aprendizaje sin resignar la calidad de los contenidos. Los alumnos cursan los espacios hasta lograr los objetivos sin “repetir”.

- Regionalización de los diseños curriculares según las características y necesidades de de cada región.

- Adecuada inversión en infraestructura básica, conectividad y tecnología.

17/6/17

Jornadas Interdisciplinarias Congreso de los Pueblos Libres



Este 29 de junio, en coincidencia con el aniversario del Congreso del Arroyo de la China de 1815, se llevará a cabo la Jornada interdisciplinaria sobre el Congreso de los pueblos libres: perspectivas, reflexiones y debates a realizarse en Paraná, en el Centro La Vieja Usina.
En el marco de la Jornada, en un acto a realizarse a las 12 horas, el gobernador de Entre Ríos Gustavo Eduardo Bordet asistirá a las Jornadas a efectos de firmar el “Convenio de Cooperación entre la provincia y el Congreso de Intendentes del Uruguay” habiéndose invitado a suscribirlo al Gobernador de Misiones Hugo Mario Passalacqua.
Organizada por el Instituto Federal de Estudios e Integración “José Artigas”, en la jornada se debatirá sobre integración regional, federalismo, enseñanza de la historia en clave regional y la influencia del ideario artiguista. Fue declarada de interés educativo por resolución Nº 2089 del Consejo General de Educación, y de Interés Institucional por Res. Nº 481/17 de la UADER.
Al cierre se desarrollará un panel con disertaciones a cargo de los especialistas Dra. Mariela Coudannes de la Universidad Nacional del Litoral, Dr. José Mateo del CONICET, Lic. Y Mg. Facundo Gabás de la UCA y UNL, y Dr. Rubén Román de la UNL y el Instituto Artiguista de Santa Fe.
La jornada está destinada a docentes de distintos niveles educativos, estudiantes de formación docente, secundarios, de carreras vinculadas a las ciencias sociales, ciencia política y afines.
Está prevista la participación de delegaciones de la provincia, de Santa Fe y de la República Oriental del Uruguay.

Otras actividades
En coincidencia con la Jornada, también se suscribirá un Convenio Marco de intercambio y cooperación entre el Congreso de Intendentes de la República Oriental del Uruguay y el Gobierno de Entre Ríos con el objeto de avanzar en la institucionalización del Comité Hidrovía del Río Uruguay.
En el marco de la misma también se proyectará la película “Andresito” del director misionero Camilo Gómez.

Ampliación
Las “Jornadas Interdisciplinarias sobre el Congreso de los Pueblos Libres: perspectivas, reflexiones y debates” tienen por objetivo propiciar un espacio de debate común entre los investigadores, docentes y estudiantes interesados en brindar interpretaciones renovadas sobre la influencia del proyecto artiguista en la región sostenido desde hace unos años por las nuevas demandas políticas, sociales y culturales.
Las políticas de integración regional -hasta la actualidad- atraviesan múltiples situaciones que merecen el análisis desde diferentes ópticas que exceden el carácter meramente histórico de las mismas. En general las ciencias sociales aspiran a confluir en miradas críticas que sean complementarias y convergentes en el análisis de nuestra realidad. De allí que la propuesta de los ejes incluya perspectivas amplias para su análisis y debate (político, económico, histórico, educativo). La reflexión sobre lo histórico nos permite considerara las crisis del presente como una necesaria herramienta para el cambio.
Propone un espacio de conformación de mesas donde se presenten las ponencias completas y se pueda enriquecer el debate a partir del aporte de especialistas en cada una de ellas. Nuestro objetivo con este encuentro es instalar en el escenario actual los trabajos realizados en institutos de investigación, trabajos de estudiantes avanzados o nóveles graduados para brindar un espacio de reflexión y socialización de los resultados obtenidos.
Los ejes a abordar durante la Jornada son:
Integración regional: abordajes historiográficos sobre la propuesta artiguista. Proyección actual.  La Integración regional como estrategia geopolítica y como clave de la política exterior de la nación.
La cultura de los pueblos y la integración regional. Las subregiones y su impacto en el desarrollo territorial. Los organismos supranacionales y una agenda que incluya la integración regional:
La Liga de los Pueblos Libres y su impacto en la organización regional: legado, implicancias políticas: acuerdos y confrontaciones.
Federalismo y Federalismo de concertación: la concepción artiguista. Las subregiones y el gobierno central. Debates en torno a la figura del caudillismo.
Asimetrías y equidad: la necesidad de políticas compensatorias. Centralidad y conformación institucional de las regiones y subregiones en el siglo XXI.
Reconversión y reorientación de la Educación y sus contenidos curriculares. Enseñanza de la Historia en clave regional: propuestas, obstáculos y nudos articuladores. El currículum en la enseñanza superior: actualización/desactualización respecto de los desarrollos regionales.

PROGRAMA
8.30  Acreditaciones
9.15 Ponencias (Módulo I): Integración regional: abordajes historiográficos sobre la propuesta artiguista. Proyección actual.
10,30 Ponencias (Módulo II): Federalismo y Federalismo de concertación: la concepción artiguista.  Autonomía y   gobierno central. Debates en torno al rol  del caudillismo en el contexto geopolítico  que nos comprende.
12.00  Apertura oficial. Firma de un convenio de cooperación entre intendentes del Uruguay y Entre Ríos
13,00 Espacio para almorzar
13,45  Ponencias (Módulo II - continuación)
15,00 Ponencias (Módulo III): Reconversión y reorientación de la Educación y sus contenidos curriculares. Enseñanza de la Historia en clave regional: propuestas, obstáculos y nudos articuladores

16,30 Panel de cierre: Dra. Mariela Coudannes (UNL), Dr. José Mateo (CONICET) Lic. Facundo Gabas (UNL, UCA), Dr. Rubén Román (UNL - Instituto Artiguista de Santa Fe).

4/6/17

Cooperativa de consumos entre empleados del ferrocarril (Basavilbaso)

Por Ricardo Cesar Bazán*

Entre Ríos provincia Pionera del Cooperativismo Argentino tiene una gran historia en materia de lo que hoy llamamos Economía Solidaria. Cuenta el Compendio de las Cooperativas de Entre Ríos de 1921 que un 20 de enero de 1919 se constituyó una cooperativa de consumo en Basavilbaso con el objeto del abaratamiento de los artículos de primera necesidad y con motivo de la huelga ocurrida poco antes, en setiembre de 1917, en cuya fecha el personal ferroviario pasó por muchas dificultades con motivo del cierre del crédito por parte del comercio de esta localidad.
Entre sus fundadores figuran los señores : Andrés Kavaldin, Florencio Zapata, Juan j. Tafalo, Pascual Codeglia, José Rosetti,  Luis Maidana, Estanislao Bustamante, José Boet, Francisco Fersinghelli, Juan Hilkisky, Pedro Ochoa, Maximiliano Sánchez, Mario Castro, Augusto Ostini, Augusto Charrier, Francisco Budriz, Juan C. Vega, Juan Cerolini, Miguel Germano, Masareo Miranda, Calixto Caparro, Carlos Gayot, Julian Barneaud, Genaro Jaurenea.
El radio de acción de la Cooperativa era todo el pueblo de Basavilbaso, como los socios no pagan fletes por las mercaderías que traen por el ferrocarril los precios no admiten competencia, por consiguiente, una mejor calidad de los artículos, buen peso y a un precio razonable.
La nacionalidad de los socios en su mayoría eran argentinos, alguno que otro italiano, francés, ruso, alemán y español.
Había en la Cooperativa la parte de Comestibles: que eran conservas, fiambres, artículos varios, Bazar, Tienda y Mercería y Librería y papelería.
El primer Consejo Directivo estuvo formado por los señores: Presidente Andrés Kavaldin, Vice-presidente Juan c. Vega, Secretario Juan J. Tófalo, Prosecretario José Rosetti, Tesorero José Roseo (hijo), Protesorero Pedro Cumini, Vocales: Estanislao Bustamante, José Boet, Pedro Ochoa; Suplentes: Juan Cesarino, Celestino Porchetto, Evaristo  Prelatti, Fiscales: Pascual Codeglia, Augusto  Charriere (hijo), Mario Castro.
Consta en acta que el compañero A. Kavaldin hace mención para que la Cooperativa no se denomine por ningún nombre, para que así no se confunda con una sociedad anónima, quedando por consiguiente con la denominación: “Cooperativa de Consumos entre Empleados del F.C.E.R” exclusivamente, lo que es aprobado por la mayoría de votos.

*Periodista Cooperativo.

21/4/17

Cooperativa Farmacéutica Del Litoral

Por Ricardo César Bazán*

La historia de la Cooperativa Farmacéutica del Litoral de Paraná se remonta al año 1953 que fue cuando comenzaron a reunirse los farmacéuticos Abrahám Guestrin y Goldman entre otros, dice una publicación de la cooperativa. 
Una de las entrevistadas, la Sra. Betty (sobrina de unos de sus fundadores, Abraham Cuestrin) cuenta: “Empezaron creo en 1953, en una casa de calle Alem, con un empleado, que creo fue Olmedo Richard y el Ctdor. Aarón Jaimovich. Juntaron un capital, con el aporte de cada uno de ellos. Ese fue el comienzo, luego se trasladaron a un local de calle España un poco más grande, hasta que fue justamente el tío Abraham, el que bregó para conseguir el terreno que hoy ocupa la Cooperativa, en el que se edificó, desde sus cimientos, el primer edificio inaugurado con grandes emociones sobre todo de quien ostentaba en ese momento el título de Presidente de la misma, mi tío Abraham. El motivo por el que se crea esta Institución fue la necesidad de protegerse, entre los farmacéuticos, de las presiones de las droguerías foráneas, consiguiendo mejores precios para los propietarios de las farmacias”.

En una foto del manuscrito original del Acta donde se le dio el nombre que tiene hasta ahora “Cooperativa Farmacéutica del Litoral Ltda”,  se lee: “discusión del anteproyecto preparado por la comisión provisoria que (ilegible) las mismas en la forma que se inserta a continuación: Artículo Primero. Bajo la denominación de “Cooperativa Farmacéutica del Litoral Ltda” se constituye una Sociedad Cooperativa Farmacéutica limitada de adquisición de elementos de trabajo y de transformación y venta de productos farmacéuticos, que estará constituida por farmacéuticos y propietarios legales de farmacia de la República Argentina, que se regirá por las disposiciones de los presentes estatutos y por la Ley Nacional N 11.388 en todo lo que no hubiese sido previsto por aquellos.- Artículo Dos: tendrá por objetivos: a) Encarar y resolver el problema integral del medicamento, desde la investigación científica”.

Otra foto del Manuscrito del Acta de Consejo número UNO de la Cooperativa se ve en el margen izquierdo que hay varias firmas y en su margen derecho dice: “Acta número UNO- Acta Constitutiva de la Cooperativa Farmacéutica del Litoral Ltda de Paraná.
“En la ciudad de Paraná siendo las nueve y treinta horas del día seis de enero de mil novecientos cincuenta y siete en el local del Bar Imperial de esta ciudad, se reunieron las personas cuya nómina y firmas figuran en el libro de asistentes a las asambleas con el objeto de dejar constituida una sociedad cooperativa farmacéutica”.
                                 

Don José Rubén Kaplun nos cuenta sobre los inicios que después de la pequeña casa de calle Alem pasaron a calle 25 de Mayo, muy cerca del actual emplazamiento, hasta que se compró el terreno en el cual hoy día están, y despacio se fue construyendo lo que fue el local propio de la cooperativa farmacéutica donde comenzó a funcionar. Este local, que tuvo muchas ampliaciones, es orgullo de sus asociados tenerlo y poder brindar los servicios, a los socios y clientes de la cooperativa.
Roberto Riso nos comenta que el ámbito o radio de acción de la cooperativa farmacéutica es toda la provincia de Entre Ríos y el sur de Corrientes, y una parte de la provincia de Santa Fe. La cooperativa farmacéutica es integrante del consejo de administración de FECOFAR que es la Federación de Cooperativas Farmacéuticas en las que hay agrupadas 10 cooperativas. Tiempo atrás estas llegaban a 50 cooperativas.
A nivel nacional se encuentra entre una de las primeras cooperativas farmacéuticas del país. El año pasado la cooperativa de Mendoza, COFARMEM, cumplió 50 años y las demás están entre los 40, 47, 48, 49 años de existencia.
En la cooperativa trabajan 80 personas, mas los consejeros y profesionales. La cooperativa farmacéutica comenzó con 12 asociados y hoy tiene 230 y clientes no asociados.
La posición de la cooperativa farmacéutica en el mercado con respecto a otras empresas que trabajan en el sector a nivel nacional ocupa el puesto 20.
“Es importante destacar que cuando uno compra en una farmacia que está provista por la Cooperativa Farmacéutica del Litoral uno tiene la seguridad de comprar el medicamento ético que merece el enfermo”,  certifica Don José Rubén Kaplun.
*Téc. Sup. en Cooperativismo

1/4/17

Crónicas de vagabundos

Por Rubén Bourlot

Aventureros, trotamundos, vagabundos. Aventureros siempre los hubo, y atravesaron nuestras lomadas, y dejaron sus historias imborrables que se trasmiten por generaciones. 
“Tú me desprecias por ser vagabundo 
y mi destino es vivir así
si vagabundo es el propio mundo
que va girando en un cielo azul”
Dice la letra de una popular canción que interpretaba el trío Los Panchos.
Los “turcos” con sus valijas de vendedores, los linyeras, crotos o como se les llame que siempre encontraban un jarro de agua fresca, un trozo de pan y un colchón para pasar la noche. Y otros muy curiosos como son los casos del “Vasco de la carretilla” y el ucraniano que sacaba fotos en bicicleta.

La carretilla y el hombre 
Un día se apareció por Concepción del Uruguay con su carretilla a cuestas. Era el hombre que portaba la carretilla, o la carretilla que transportaba al hombre. A esa altura, con más de una década de andar caminos juntos, hombre y carretilla eran uno. Le decían “El Vasco de la carretilla” y en cada lugar que arribaba ganaba la portada de los periódicos, y cuando no los había, el rumor corría de boca en boca.
Larregui y su carretilla
Guillermo Isidoro Larregui Ugarte era su nombre y había nacido en Pamplona, en el país Vasco, el 27 de noviembre de 1885, conocido como El Vasco de la carretilla y también "El Quijote de una sola rueda". Llegó a Buenos Aires en 1900 con solo 15 años y tuvo varios trabajos en distintos puntos del país. En 1935, estando en Santa Cruz, apostó que era capaz de llegar a Buenos Aires a pie, detrás de una carretilla. Ya tenía 50 años pero el espíritu y el físico que le envidarían muchos jóvenes. Desde que partió, ante la incredulidad de la mayoría, hasta que finalmente arribó a Buenos Aires, pasaron 14 meses. 
Recorrió, en 14 años (1935 a 1949), más de 20.000 kilómetros a pie empujando una carretilla de 130 kilos. En su transporte llevaba lo indispensable para sobrevivir: una carpa de 2,5 m. de largo por 2 m. de ancho; un catre, colchón y colcha. Herramientas completas, utensilios de cocina, calentador, juego de lavabo, cepillos, brocha, navaja y provisiones.
Llevó a cabo cuatro caminatas. La segunda la comenzó en 1943, desde Coronel Pringles (provincia de Buenos Aires.), y la finalizó en La Paz (Bolivia). La tercera la realizó desde Villa María (Córdoba), hasta Santiago de Chile, y la cuarta y última caminata la efectuó desde Trenque Lauquen (Buenos Aires), hasta el Parque Nacional Iguazú, en Misiones.
Función de teatro a beneficio
del vasco de la carretilla
El último itinerario es el que comprendió la Mesopotamia y tocó distintas localidades entrerrianas. Venía precedido de una bien ganada fama que se reflejaba en los medios nacionales. 
Una pequeña publicación de Concepción del Uruguay, Palenque, le realiza una entrevista en 1944 a su llegada a la ciudad. “Una visita inesperada pero grata ha venido a sorprendernos, se trata del original y popular Don Guillermo Larregui… - escribe el periódico- quien junto al polvo de los caminos nos ha traído su bagaje de interesantes historias…”. Ante la pregunta si no se aburre de viajar en soledad, manifiesta que ya está acostumbrado, que tuvo un perro llamado Pancho “que fue mi compañero cuatro años hasta que una insolación lo mató en Santa Fe. Ahora ando en busca de un cachorro bueno que quiero enseñar a mi manera.”
Cuenta Larregui que en sus viajes tomas fotos y apuntes con la intención de volcarlos en un libro. Y también relata sus viajes y que su primera carretilla fuera depositada en el Museo de Luján. 
Cuando le preguntan si obtiene algún beneficio económico con sus aventuras responde: “Aunque nada tengo, nada quiero. Esta hazaña la he realizado porque la prometí cumplir. Con ser hombre de palabra cualquier vasco está bien pagado”.

El fotógrafo en bicicleta
Otro trotamundos que marcó su presencia en nuestra comarca fue el iniciador de una saga familiar de fotógrafos: Nicolás Warenycia.  Había venido de la remota Ucrania, trayendo sobre su piel las marcas indelebles de la guerra y en su corazón el deseo irrefutable de encontrar su lugar en el mundo. Se había casado con Miguelina Manlulak, a quien había conocido en la ciudad de Apóstoles, Misiones, adonde había arribado a su llegada de Ucrania.
Como dato anecdótico podemos agregar que en su vivienda tenía una mandolina y un clarinete, y que cada mañana, puntualmente a la hora diez, daba a sus hijos una clase de lectura, escritura y oralidad en idioma ucraniano.
Warenycia y su bicicleta
Finalmente recaló en Arroyo Barú, donde se dedicó a múltiples actividades, tales como la de "catango" del ferrocarril, albañil, reparador de objetos diversos (relojes de pared, acordeones, bandoneones, etc.) y, en la última época, comerciante.
Pero sin dudas, en la que más se destacó fue en su profesión de fotógrafo, dejando plasmadas en cientos de imágenes las impresiones características de la vida pueblerina, en sus diversas facetas.
Siendo muy joven y curioso, había aprendido la técnica fotográfica en su lejana Ucrania, observando a un soldado de los que se habían acantonado en la casa de su abuela, utilizándola como improvisado cuartel.
Según relata su hija Amelia, antes de contar en su vivienda con un cuarto de revelado, realizaba dicho procedimiento dentro del tanque de agua de la estación. En esa época los negativos eran de vidrio, y Nicolás se movilizaba en una bicicleta, a la cual le había adosado un cajoncito, donde acondicionaba todos los elementos necesarios para el ejercicio de su profesión.

Bibliografía:
Norma Cooke y Susana de Santiago,  Por los senderos de la memoria. Narrativa histórica de Arroyo Barú, Colón, 2011.
Txema Urrutia, El vasco de la carretilla: 14 años a pie por la República Argentina, 1935-1949,   Ed. Txalaparta, Tafalla, 2001.
“Nos visitó ‘El Vasco de la carretilla’, en Palenque, 30 de marzo de 1944 y 15 de abril de 1944.
https://es.wikipedia.org/wiki/El_Vasco_de_la_Carretilla

21/3/17

La provincia de Entre Ríos finalizó la publicación de una nueva Línea de Tiempo Temática “Proceso de colonización agrícola”

En el marco del Proyecto Genoma http://genoma.cfi.org.ar/, el equipo de investigación de la provincia de Entre Ríos ha finalizado con éxito la publicación de la Línea de Tiempo “Proceso de colonización agrícola” y, además, ha incorporado nuevos eventos a las Líneas Histórica Provincial y Departamentales que oportunamente fueron publicadas.
El equipo de historiadores coordinados por el Prof. Rubén Isidoro Bourlot  ha realizado la investigación que da lugar a la nueva Línea.
“Proceso de colonización agrícola” comprende los diversos ciclos de producción a partir de las prácticas de este tipo. Desde los primeros indicios de cultivos de los pueblos americanos prehispánicos, el desarrollo de una agricultura incipiente durante el periodo de ocupación hispánico criolla, las prácticas agrícolas de los primeros años del periodo independiente, hasta la expansión de la agricultura con el aporte de la inmigración europea. Entre Ríos, hasta hoy, es una provincia caracterizada por la economía de producción agrícola- ganadera y sus industrias transformadoras.
Se pone el acento en el término “colonización” porque, en la región, el proceso de desarrollo de la agricultura se fue dando con el aporte de distintas corrientes inmigratorias que ocuparon los espacios, inicialmente con el arribo de los guaraníes que trajeron la de tradición amazónica, posteriormente con la ocupación de descendientes de españoles y finalmente, con la inmigración masiva europea desde mediados del siglo XIX que formó las colonias agrícolas.
Entre los eventos clave de este proceso se pueden señalar:
Los invitamos a recorrer Línea de Tiempo “Proceso de colonización agrícola” y además, recordamos que pueden también interiorizarse sobre otras líneas provinciales, temáticas y biográficas ya publicadas, y explorar así nuestro pasado.
http://cfi.org.ar/nota/la-provincia-de-entre-rios-finalizo-la-publicacion-de-una-nueva-linea-de-tiempo-tematica-proceso-de-colonizacion-agricola/

20/3/17

Nuevas publicaciones de la Línea de Tiempo de Entre Ríos

Nuevas publicaciones de la Línea de Tiempo de Entre Ríos

En el marco del Proyecto Genoma http://genoma.cfi.org.ar/, el equipo de investigación de la Provincia de Entre Ríos ha finalizado con éxito un trabajo de investigación, producción y edición de contenidos correspondientes para la publicación de sus Líneas de tiempo departamentales, así como también la Línea de tiempo de la Provincia de Entre Ríos y Proceso de colonización agrícola.
En cuanto a la Línea Autonomía Federal, se realizó una investigación científica, con información de fuentes primarias y secundarias, con la finalidad de elaborar contenidos enciclopédicos, incorporando fotos, así como su georreferenciación, para la creación de la línea del proceso de la autonomía provincial (el artiguismo, Francisco Ramírez, Justo José de Urquiza y el jordanismo), y su protagonismo en los distintos procesos desde el nacimiento de Francisco Ramírez, la autonomía de Entre Ríos y luego su provincialización incluyendo la creación de la República de Entre Ríos por Ramírez, constituida por las actuales provincias de Misiones, Corrientes y Entre Ríos, la importancia de la construcción del Túnel Subfluvial, entre sucesos de importancia en la vida organizacional del país.
Con mucha expectativa, se invita a todo aquel que desee interiorizarse sobre la Historia de la Provincia de Entre Ríos y de la Argentina a recorrer las distintas líneas de tiempo publicadas.
Para publicar en este blog enviar los artículos a bourlotruben@gmail.com. Son requisitos que traten sobre la temática de este espacio, con una extensión no mayor a 2500 caracteres y agregar los datos del autor. Se puede adjuntar una imagen en formato jpg.
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